Mis más sinceros deseos para este año que recién comienza.
El llamado para este año es lograr mantener viva la sagrada llama que llevamos dentro, aquel fuego infinito y verdadero que yace en nuestro corazón que se expresa en aquella sabia y silenciosa voz interior, la voz del silencio, la voz de la intuición.
Aparecerán nuevas personas en nuestras vidas y otras ya no estarán más junto a nosotros. Nos moveremos de un lado a otro y seremos perseverantes en cada empresa que nos propongamos, seremos reconocedores de lo que empieza a nacer en nuestra vida y en la de nuestros semejantes, nos propondremos alimentar los sueños de los otros, aquellos que empiezan recién a volar y aquellos que ya cansado de volar se les ha olvidado soñar. Estaremos atentos a vivir con gran intensidad, con intensa alegría, en plena libertad, libres para hacer y para simplemente Ser.
A cada momento construiremos nuestro futuro, esta vez sin miedo, esta vez alegres de poder crear, de poder servir y de la misma forma permitiéndonos recibir lo que la vida nos propone.
Sentiremos que estamos vivos y que somos merecedores de alegrías y riquezas, de la eterna sabiduría que mora en la bondad, en la compasión y en el arte de escuchar. Nos reconoceremos en cada situación como artistas de la creatividad y hacedores de creación.
Vibremos este año con lo mejor que esta por nacer en cada cual, felices por siempre junto al sol que todo lo ilumina. Abrazos solares, Jorge.